Michele Arcangelo De Gasperin
Comparto con toda la parentela la foto de Michele Arcangelo De Gasperin que se encuentra en el archivo general de la nación (México) cuando a bordo del barco Atlántico llegó a Veracruz (México) en octubre de 1881 junto con otras familias del Véneto. Con él viajaba toda su familia: su esposa Angela (Andoleta) Basei, sus hijos: Genoveffa, Giácomo, Giuseppe, Vigilio, Isabella y Santina. Como está escrito en el libro, después de diez años de trabajar en México, deciden regresar a Italia a un pueblito llamado Soranzen del comune de Cesiomaggiore, Bl. Solo Isabella que ya se había casado con Antonio Cesa se quedaron para siempre en México; Vigilio cuando se marchaba a Italia le prometió a Isabella que regresaría cosa que cumplió después de haber participado en la guerra de Eritrea (África) y con su esposa Teresa Gris y sus hijos Modesto, Raimondo, Delfino y Gino arribaron a Veracruz en el año de 1912; a los cuatro meses nació mi papá Ernesto y posteriormente Isabella, Amalia, Ida y Rita.
Javier Sicilia: ültimo poema.
México, nuestro amado país, de gente maravillosa se hunde día a día a causa de la violencia, a causa de los políticos y de los criminales. En Cuernavaca, Morelos asesinaron a un grupo de muchachos, entre ellos el hijo del poeta javier Sicilia quien según dijo, escribió su último poema a su hijo asesinado por los delincuentes y la clase política.
“El mundo ya no es mundo de la palabra. Nos la ahogaron dentro, como te asfixiaron, como te desgarraron a ti los pulmones y el dolor no se aparta. Solo tengo al mundo. Por el silencio de los justos sólo por tu silencio y por mi silencio, Juanelo…
El mundo ya no es digno de la palabra, es mi último poema, no puedo escribir más poesía… La poesía ya no existe en mí”. Javier Sicilia.
MÉXICO, DF., 3 de abril (Proceso).- El brutal asesinato de mi hijo Juan Francisco, de Julio César Romero Jaime, de Luis Antonio Romero Jaime y de Gabriel Anejo Escalera, se suma a los de tantos otros muchachos y muchachas que han sido igualmente asesinados a lo largo y ancho del país a causa no sólo de la guerra desatada por el gobierno de Calderón contra el crimen organizado, sino del pudrimiento del corazón que se ha apoderado de la mal llamada clase política y de la clase criminal, que ha roto sus códigos de honor.No quiero, en esta carta, hablarles de las virtudes de mi hijo, que eran inmensas, ni de las de los otros muchachos que vi florecer a su lado, estudiando, jugando, amando, creciendo, para servir, como tantos otros muchachos, a este país que ustedes han desgarrado. Hablar de ello no serviría más que para conmover lo que ya de por sí conmueve el corazón de la ciudadanía hasta la indignación. No quiero tampoco hablar del dolor de mi familia y de la familia de cada uno de los muchachos destruidos. Para ese dolor no hay palabras –sólo la poesía puede acercarse un poco a él, y ustedes no saben de poesía–. Lo que hoy quiero decirles desde esas vidas mutiladas, desde ese dolor que carece de nombre porque es fruto de lo que no pertenece a la naturaleza –la muerte de un hijo es siempre antinatural y por ello carece de nombre: entonces no se es huérfano ni viudo, se es simple y dolorosamente nada–, desde esas vidas mutiladas, repito, desde ese suf rimiento, desde la indignación que esas muertes han provocado, es simplemente que estamos hasta la madre. Estamos hasta la madre de ustedes, políticos –y cuando digo políticos no me refiero a ninguno en particular, sino a una buena parte de ustedes, incluyendo a quienes componen los partidos–, porque en sus luchas por el poder han desgarrado el tejido de la nación, porque en medio de esta guerra mal planteada, mal hecha, mal dirigida, de esta guerra que ha puesto al país en estado de emergencia, han sido incapaces –a causa de sus mezquindades, de sus pugnas, de su miserable grilla, de su lucha por el poder– de crear los consensos que la nación necesita para encontrar la unidad sin la cual este país no tendrá salida; estamos hasta la madre, porque la corrupción de las instituciones judiciales genera la complicidad con el crimen y la impunidad para cometerlo; porque, en medio de esa corrupción que muestra el fracaso del Estado, cada ciudadano de este país ha sido reducido a lo que el filósofo Giorgio Agamben llamó, con palabra griega, zoe: la vida no protegida, la vida de un animal, de un ser que puede ser violentado, secuestrado, vejado y asesinado impunemente; estamos hasta la madre porque sólo tienen imaginación para la violencia, para las armas, para el insulto y, con ello, un profundo desprecio por la educación, la cultura y las oportunidades de trabajo honrado y bueno, que es lo que hace a las buenas naciones; estamos hasta la madre porque esa corta imaginación está permitiendo que nuestros muchachos, nuestros hijos, no sólo sean asesinados sino, después, criminalizados, vueltos falsamente culpables para satisfacer el ánimo de esa imaginación; estamos hasta la madre porque otra parte de nuestros muchachos, a causa de la ausencia de un buen plan de gobierno, no tienen oportunidades para educarse, para encontrar un trabajo digno y, arrojados a las periferias, son posibles reclutas para el crimen organizado y la violencia; estamos hasta la madre porque a causa de todo ello la ciudadanía ha perdi do confianza en sus gobernantes, en sus policías, en su Ejé! rcito, y tiene miedo y dolor; estamos hasta la madre porque lo único que les importa, además de un poder impotente que sólo sirve para administrar la desgracia, es el dinero, el fomento de la competencia, de su pinche “competitividad” y del consumo desmesurado, que son otros nombres de la violencia. De ustedes, criminales, estamos hasta la madre, de su violencia, de su pérdida de honorabilidad, de su crueldad, de su sinsentido. Extracto de la carta que Sicilia publica en la edición 1976 de la revista Proceso, ya en circulación.
Saludos hasta Udine, Italia
Celebramos con Erica De Gasperin que vive en Udine, la llegada de su hijo Lorenzo. Felicitamos en Soranzen al orgulloso abuelo Fermo. marzo 2011.

Il piccolino desplegó sus alas!!!
Hoy, 23 de marzo del 2011 Il Piccolino desplegó sus alas. En agosto del año pasado recibimos en el club aeronáutico de Córdoba el avión Kitfox lV versión patín de cola (convencional), la primera foto que le tomé volando en el otro avión, un Challenger ll fue en el mes de septiembre del 2010, sin embargo, después de tres aterrizajes en los cuales el avión “se fue al monte” y atendiendo el consejo de un amigo que “a esta edad no debemos andar haciendo pendejadas”, decidimos cambiar la configuración a triciclo. El día de hoy en compañia de Alfonso Castelán hicimos el primer vuelo, obviamente con mucha adrenalina de por medio, sin embargo il piccolino se comportó de maravilla en todo el vuelo: un buen despegue, a 45 millas ya estaba en el aire, un vuelo suave, bién trimado y finalmente en el aterrizaje hecho sin contratiempos. Volar en Córdoba siempre es una experiencia extraordinaria, por los paisajes de gran belleza. En la segunda foto, con Luis Vargas Carvajal, Alfonso Castelán y Ernesto De Gasperin, tres de los cuatro integrantes del club aeronáutico.
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